Mejores aseos públicos en Madrid
En los urinarios de pared de los baños públicos, esos que se alinean en bares, estaciones, gimnasios y parques, pasan cosas que van mucho más allá. Entre el olor penetrante, las baldosas frías y el ruido constante de cisternas, se cruzan miradas fugaces, silencios incómodos y a veces hasta gestos que dicen más de lo que deberían. Son rincones donde lo cotidiano se mezcla con lo oculto, donde cada visita puede ser tan rutinaria como inesperadamente reveladora. Nadie habla de lo que pasa ahí dentro, pero todos saben que algo pasa.